martes, 12 de junio de 2012

El estudio en mi vida

Les voy a contar un poco sobre mi vida. Lo que he aprendido desde preescolar, primaria, secundaria, un poco de preparatoria y algunos otros cursos en los que me he inscrito.

Recuerdo cuando entré al kínder. Mi primer día  de clases fue infernal, pues recuerdo que lloré, y le dije a mi mamá que no me dejara ahí. Paso como una semana completa, sin dejar de llorar. Cada vez que me acuerdo de eso me rio, y me pongo a pensar  porque lloraba,  si todos los demás no lo hacían, ¿Por qué yo si?


En la casa yo era un niño demasiado inquieto, y mi mamá me decía que cuando entrara a la escuela se me iba a quitar, pues estaría en contacto con diferentes tipos de personas, y mis profesores me ayudarían mucho, porque me enseñarían hacer un niño disciplinado.

Mis maestros; recuerdo  que eran muy  buenos,  pues  después de hacer cualquier trabajo, se ponían a contarnos cuentos, y siempre queríamos terminar pronto para que nos contaran más, y  al finalizar; salíamos contentos, pues la habíamos pasado muy bien.

Tenía muchos compañeros, pero sólo con tres de ellos  me juntaba;  y jugaba más. Con ellos comía en el recreo, también me la pasaba platicando a todas horas, aunque la maestra nos regañaba por estar platicando en las clases.
    
      Las clases, la verdad; no me gustaban mucho,  pues a veces eran aburridas.  Cuando se trataba de colorear o de dibujar me encantaba, porque era una de mis cosas favoritas, aparte de jugar fútbol. Al paso del tiempo, me fui acostumbrando a mis compañeros y a las clases de mi maestra. A final del curso, me dio tristeza, y a la misma vez; me sentí muy bien, pues sabía que me esperaba la primaria.

     En la primaria fue todo más fácil, pues yo, ya estaba un poco más grande, y sabía que era una nueva etapa de mi vida.  Estaba emocionado porque aprendería cosas nuevas, asi como compañeros y profesores. El primer grado fue el más fácil, pues sólo era un repaso de lo que miré en el kínder.

       El tercer grado fue el más bonito para mí, pues se me hizo que aprendí más cosas que en los anteriores.  Entré a un equipo de fútbol, ese año ganamos el torneo y festejamos en grande. Cuarto y quinto fueron muy buenos, aprendí a expresarme mejor en cosas nuevas; me tocó exponer varios temas, y me daba vergüenza pasar al frente de todo el grupo y explicar mi tema pues tenía miedo que mis compañeros se burlaran de mí.
   
         Cuando empecé a cursar el sexto grado, se me hizo que el tiempo pasó volando, porque sólo fue un repaso de todo lo que había visto los años anteriores. Al final del curso, si se me hizo un poco difícil, pues estaba encariñado con mis compañeros  y mis profesores;  de hecho, todavía los frecuento.
    
        Al entrar a la secundaría todo era nuevo para mi, pues empezaba una nueva etapa en mi estudio, y también en mi vida. Rápido hice amigos, amigas y era un poco más sociable, porque hasta con los profesores, me llevaba súper bien. Lo que casi nunca me gustó; fue mi  uniforme, tenía colores muy feos.

       El  segundo y tercer grado, fueron los más apegados con mis compañeros, pues compartí una etapa muy bonita con ellos, convivimos mucho tiempo. Lo más bonito de todo y lo que más recuerdo; es el día de la graduación, todas y todos, nos mirábamos muy felices de haber terminado el curso.
       
       La prepa la inicié en el Sistema Abierto e hice solo algunas materias.  No les puedo contar mucho porque no la  terminé, pero este año me he propuesto terminarla en el sistema CENEVAL. Actualmente estoy tomando cursos para actualizarme y poder seguir con mis estudios a nivel superior.
Creo que alguien que estudia se está superando y es importante seguir con él, porque sin él, no seremos capaces de enfrentar nuestra  vida con éxito.

No hay comentarios:

Publicar un comentario